Noticias de la compañía Elegir entre frecuencias: 28 kHz vs 40 kHz para la limpieza de motores ultrasónicos
Al seleccionar una máquina de limpieza ultrasónica de acero inoxidable para motores / limpieza de filtros DPF con bomba, una de las decisiones técnicas más importantes es la selección de la frecuencia. Muchas máquinas ofrecen configuraciones como 28 kHz o 40 kHz. Comprender la diferencia le ayuda a adaptar la máquina a sus necesidades de limpieza.
¿Qué significa frecuencia en la limpieza por ultrasonidos?
La frecuencia se refiere al número de ciclos de ondas sonoras por segundo. Las frecuencias más bajas producen burbujas de cavitación más grandes que colapsan con mayor energía y producen un impacto mecánico más fuerte. Las frecuencias más altas crean burbujas más pequeñas con menos fuerza agresiva pero una resolución de limpieza más fina.
Cuándo usar 28 kHz
Para piezas muy sucias, como bloques de motor con acumulación de carbono gruesa, filtros DPF con hollín horneado, componentes de turbocompresores con depósitos pesados.
Cuando se necesita impacto mecánico para desalojar grasa, aceite, carbono, óxido o salpicaduras de soldadura pesadas.
Cuando las piezas son resistentes y duraderas, y no tienen superficies extremadamente delicadas.
El resultado es una limpieza más rápida y profunda de la contaminación difícil.
Cuándo usar 40 kHz
Para piezas con características más delicadas: fundiciones de paredes delgadas, aletas internas, pasajes finos o superficies recubiertas.
Para eliminar contaminación ligera, partículas finas, residuos de pulido o piezas de motor desgastables que deben mantener la integridad de la superficie.
Cuando prefiere una acción de limpieza más suave para evitar picaduras o daños en la superficie.
Un resultado más limpio con un riesgo mínimo de daño al sustrato.
Máquinas híbridas o de doble frecuencia
Muchos limpiadores ultrasónicos modernos para la limpieza de motores y filtros ofrecen ambas opciones de frecuencia (28 kHz y 40 kHz) para que pueda cambiar según el tipo de pieza y contaminación. Esta versatilidad permite que una máquina maneje una amplia gama de tareas de limpieza.
Otros parámetros relacionados
Más allá de la frecuencia, debe considerar la potencia (por ejemplo, 3600 W), el tamaño del tanque, la temperatura, la solución química y el sistema de bomba/filtración. Una frecuencia más baja con potencia insuficiente o un flujo de fluido inadecuado puede ofrecer una limpieza subóptima. Asimismo, una frecuencia más alta por sí sola no puede compensar la mala calidad del fluido o una solución incorrecta.
Puntos de decisión prácticos
Revise su carga de trabajo típica: si principalmente limpia carbono/hollín pesado y piezas grandes de motor, entonces 28 kHz es esencial. Si también limpia componentes de precisión, entonces 40 kHz (o doble frecuencia) es más inteligente.
Considere la geometría de la pieza: las formas complejas, los pasajes finos o las paredes delgadas favorecen una frecuencia más alta para una limpieza más suave.
Considere el rendimiento: las piezas resistentes con cargas pesadas se benefician de una frecuencia más baja y una mayor potencia para la velocidad.
Asegúrese de que su máquina permita la selección de frecuencia y consulte al fabricante para obtener configuraciones y tiempos de ciclo óptimos.
En conclusión, la frecuencia es una especificación clave para las máquinas de limpieza ultrasónica destinadas a piezas de motor y filtros DPF. Elegir 28 kHz para suciedad pesada y 40 kHz para una limpieza más fina le brinda lo mejor de ambos mundos. Un limpiador ultrasónico de acero inoxidable para motores con bomba que admita ambas frecuencias es muy flexible y a prueba de futuro.